La comunidad costera de Wonsan ofrece un poco de alivio de lo que puede ser una vida difícil en Corea del Norte. La comida no es siempre fácil de conseguir, y los bajos salarios conducen a una muy magra renta disponible para gastar en su tiempo libre – no porque haya muchas opciones para hacerlo tampoco.
Cualquiera que haya tenido un día de familia en la playa en España, sin duda, sabe que las meriendas pueden ser un poco caras – y por lo general tiene sentido traer su propia comida. Bueno, es hora de dejar de quejarse! En comparación con los costos en Corea del Norte, puede dejar su comida en casa y comprar aquí, donde poco dinero entra y por ende, todo es comparativamente barato.
De regreso a Pyongyang, donde la libertad de vestir de playa no se permite, deberá desembolsar 4 euros por una pizza, lo que equivale al salario promedio de los trabajadores Norcoreanos. Ahora, aparte del hecho informativo de conocer la oferta turística del país, no recomendamos que visite este balneario. No solamente es complicado entrar en el país, sino que las prestaciones que puede encontrar lo convierten en un lugar solamente para los fanáticos de lo prohibido.
